Domingo caluroso de julio en Londres. Sí, caluroso, húmedo y con cielo despejado. Nos vamos al teatro a las dos de la tarde con Alexandra, de 4 años, en busca de nubes.
Cuando hace meses contacté con el departamento de prensa y de producción de la compañía Aracaladanza para pedir los pases de prensa, lo que no me imaginaba es que al final, en lugar de ir uno de nuestros colaboradores*, iríamos mi marido, mi hija y yo. No. No usé pase de prensa, fue Paulina quien me los regaló. ¡Gracias Pau!
Y aquí estoy, escribiendo, cual bloguera**, mi review de Nubes (Clouds), un espectáculo de danza contemporánea basado en el universo surrealista del pintor René Magritte.
Ir al teatro en familia es una experiencia extraordinaria, por su puesto si eres padre o te gustan, mucho, los niños. Si encima es teatro español en Londres, las expectativas crecen y le explicas a tu/tus retoños que aquello que van a ver está hecho en ese sitio al que vamos de vacaciones, hace sol y viven los abuelos.[image_frame path=”public://nubes1.jpg” alt=”alt” title=”title” caption=”Fotos © Eduardo García González”][/image_frame]
Aracaladanza. Fotos © Eduardo García González
El teatro está casi lleno, aunque el bullicio es tan grande con tantos niños que parece que hay overbooking. En el escenario unas casas amontonadas nos hacen intuir que tomaremos altura. El público infantil no para de moverse, hablar, preguntar y ¡comer!. Se apagan las luces; se hace el silencio; empieza la música y todos esos pequeños, ruidosos e incómodos niños se quedan completamente en silencio. Alexandra me aprieta la mano mientras fija su mirada en el escenario. Así estará durante casi la hora que dura la función. ¡Atenta! ¡Hipnotizada!
Alexandra me aprieta la mano mientras fija su mirada en el escenario. Así estará durante casi la hora que dura la función. ¡Atenta! ¡Hipnotizada!
Nubes es un espectáculo de música, danza, sombras chinescas, arte, magia, luces y mimo inspirado en la pintura de Magritte. Cincuenta minutos en los que te trasladas a un universo surreal, mágico y fantástico en el que la imaginación y la creatividad te llevan a través de ovejas y mesas que se convierten en nubes, o nubes en ovejas. Donde el viento está presente a través del movimiento producido por el aire, crea volúmenes, infla plásticos, mueve globos y forma nubes. Estas tapan la luz, producen sombra y traen la lluvia. La lluvia moja e incluso nuestra propia sombra ha de sacar su paraguas o usar el bombín de Magritte para resguardarse.
La música original de Mariano Lozano P. Ramos nos envuelve suavemente al mismo tiempo que nos traslada a ese cielo figurado en el que los bailarines parecen flotar entre las nubes. Nos relajamos pero estamos expectantes, esperando a ver qué sucederá en el siguiente instante. Los niños desde el primer momento entienden toda la metáfora. ¡Mira una nube gigante!, anuncia nuestro vecino de butaca a su madre. No pierden detalle. Sorprendidos pero integrados en el instante imaginario que están viviendo.
Fanstasía, imaginación y magia son los ingredientes esenciales del trabajo de Aracaladanza, compañía de danza contemporánea madrileña, conocida por sus propuestas escénicas serias, rigurosas, sin concesiones y de alta calidad. El universo de Magritte está presente a través de hombres con bombín, la manzana, la lluvia de hombres y sus puertas.
Aracaladanza. Fotos © Eduardo García González
Los bailarines realizan un trabajo impresionante haciendo que la coreografía fluya llena de movimiento, ritmo y expresividad. Mueven y bailan usando los elementos del escenario y juegan transformando su propio vestuario… que por cierto, ¡es fantástico!, verde, azul, rojo blanco y negro; trajes, tutús, smoking con aletas, faldas hechas con globos y el siempre presente bombín.
Unos hombres muy altos, vestidos de traje negro aparecen en el escenario bailando. Son marionetas humanas, tan expresivas, incluso sin caras, que arrancan risas, exclamaciones y grandes ovaciones cuando los bailarines se quitan la cabeza y sus cuerpos continúan bailando al ritmo de la música.
Cuando en el último número aparece la nieve, los más pequeños miran hacia arriba sorprendidos de que esa nieve-lluvia caiga en el teatro. Cuando se cierra el telón el escenario está cubierto de pequeños trocitos de plástico. Los niños y niñas se acercan a tocar y comprobar de qué está hecha esa nieve mágica.
Se encienden las luces y prácticamente todo el teatro menudo se pone de pie, aplauden, los padres tenemos todos cara de satisfacción al ver como hemos disfrutado todos en familia. Salen hasta cuatro veces a saludar al público londinense, que se ha venido un domingo a Southbank Centre a viajar con ellos a las nubes.
Se encienden las luces y prácticamente todo el teatro menudo se pone de pie, aplauden, los padres tenemos todos cara de satisfacción al ver como hemos disfrutado todos en familia. Salen hasta cuatro veces a saludar al público londinense, que se ha venido un domingo a Southbank Centre a viajar con ellos a las nubes.
En los últimos 15 años Reino Unido ha mostrado un especial interés por el compromiso desarrollado por la compañía dirigida por el coreógrafo y director Enrique Cabrera, de hecho, Aracaladanza colabora de manera estrecha con agencias británicas de danza, universidades y centros de arte. Este año hemos tenido la oportunidad de ver dos de sus espectáculos en Inglaterra: Constelaciones y Nubes. Ambos pertenecen a la trilogía de la pintura, tres piezas que nos acercan a los cuadros, fantasías y universos de tres grandes artistas: el Bosco (Pequeños Paraísos), Magritte (Nubes) y Miró (Constelaciones).
Cabrera y su compañía parten con su espectáculo “Constelaciones” a China a finales de Agosto. En los últimos años han visitado países en África, Europa y Asia.
Nosotros salimos del Queen Elizabeth Hall felices. Sí. Nos hemos hecho seguidores de Aracaladanza.
* Escritores profesionales, no plumillas como yo.
** Lo siento Gelines, no me he podido resistir!
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Nubes en Southbank Centre en Londres / Sat 26 Jul 2014–Wed 30 Jul 2014)
